lunes, marzo 20, 2006

La Sultana

Empecé a investigar... Bueno, la neta no es cieto, sólo les he preguntado a los batos del hotel el porqué se le llama"La Sultana del Norte" y no me supieron decir. Me cayó una chambita que me va a traer viajando durante unos quince días... Por hoy he visitado el Obispado y caminé por la Macro-plaza y sus cachondos praditos alamedescos... Hay un bar junto al hotel en donde las meseras son monjitas acompañadas al son de uno de tantos nichohinojosas que hay por acá. Cosa rara... Justo después de verme enterita la serie Lost, me toca la peor turbulencia jamas vivida en un avioncito... vaya experiencia... mi compañero Pollo, pálido; dos reinitas a mi lado, persignándose... Coño, y yo a quién me encomendaba, sólo me quedó la risa nerviosa que pareció terminarse hasta que terminó la noche. Existe por aquí un pasaje bastante coquetón en donde te sientas a tomar el cafecito al lado del paso del agua. Nomás faltan las Góndolas. Total, hay unos cuantos patitos que me mantuvieron lo suficientemente distraído oyendo sin oír a uno de mis compas que me habló durante media hora de una película de Bárbara Mori que se filmó ahí... Coño, quién va a la Venezia regiomontana a hablar de la filmografía de ésa Tía... Coño, quién ve las películas de ésa tía...!! Agotado el tema continúa otra curiosa compañerita discertando sobre los libros de Carlos Cuauhtémoc Sánchez...
Sin Palabras... había unos simpáticos patitos por ahí, que parecían entender mi necesidad de estar sin estar y se paseaban cerca de mis ojos... Hay una alberquita simpática aquí en el hotel y he decidido estar echado entradas las nochecitas para evitar aquéllas interesantes conversaciones. Se duerme de fábula después de nadar. En unos tres días salimos a la Perla Tapatía... Ya no hay necesidad de hacer ninguna investigación acerca del nombre. Además, de Guanatos ya no hay mas qué decir... Ella ya sabe que voy y ya me espera allá... No sé si ya tiene a alguien mas y no importa... Sé que me perderé en sus ojos tapatíos, aunque después me pierda o no entre sus piernas...
Después de Guanatos volamos a Veracruz... Ahí esperan los restos de mi madre... Ya viene el día. No hay mas qué decir...
El intinerario laboral acaba en Oaxaca, pero sólo para regresar y lanzarme en chinga a Tepoztlán, a la boda de una cuasi-hermana...

Viajar es lo mejor que existe. me voy porque en éste puto hotel la hora de interné cuesta 60 bolas... Lo que cuestan tres chelas...

1 comentario:

Anónimo dijo...

jhajhaha :D
yo quiero saber que es la sultana del norte ¬¬ me encando lo de las chelas jhajhaha xD